A 51 años de la llegada de Independiente a la luna: la verdadera historia del banderín que viajó en el Apolo XI

En la parte roja de Avellaneda creen que si en la Luna hubiese fútbol, todos serían hinchas de Independiente. Para hacer semejante sentencia se aferran a un suceso que toma cada vez mayor dimensión con el correr de los años: el 20 de julio de 1969, tres hombres cambiaron para siempre la historia de la humanidad al llegar a mencionado satélite. Se trata de Neil Armstrong, Edwin Aldrin y Michael Collins, quienes viajaron en el Apolo 11 con la bandera estadounidense y con el banderín del Diablo.

La historia del banderín de Independiente que llegó a la luna (Fotomontaje)

No se trata de un mito o una leyenda urbana. Es veracidad pura. «Si ellos van a ser los héroes más grandes del siglo, tienen que ser socios de Independiente». La frase la dijo Héctor Rodríguez, secretario de Prensa y Relaciones Públicas del club de Avellaneda a comienzos de 1969. A partir de esta ingeniosa ocurrencia, el trío fue nombrado socio honorario de Independiente. Aldrin fue el afiliado número 80.399, Armstrong, el 80.400 y Collins, el 80.401.

Los carnets y el resto del kit llegaron a destino antes de la partida del cohete, que justamente este lunes cumple 51 años de su despegue. Y por si alguno se animaba a sospechar de este acontecimiento, el propio Amstrong se encargó de confirmarlo con una carta datada el 23 de mayo de 1969, cuando escribió: «Estimado señor Rodríguez. En nombre de los miembros de la tripulación del Apollo XI, quiero agradecerles por su muy linda carta y por su amabilidad al enviarnos los tres banderines. Deseo volver pronto y visitar Buenos Aires. Y espero que las circunstancias me permitan aceptar su invitación para visitar su club. Sinceramente, Neil Armstrong».

Como es de público conocimiento, el viaje fue un éxito. Y en su regreso a la Tierra, estos tres protagonistas visitaron Argentina como parte de una gira mundial, y si bien no pudieron recorrer las instalaciones del club, manifestaron que el banderín del Rojo viajó a la luna como una especie de «amuleto».

Lejos de conformarse con aquella movida mediática, Rodríguez -en 1996- tuvo un segundo contacto con estos héroes, a quienes les envió más indumentaria oficial del club. Por esta razón, los hinchas de Independiente no sólo inflan el pecho por hazañas deportivas sino también se jactan de este suceso inigualable. Para ellos, la luna es roja…