La compañía Escénica Teadanz Experimental, dirigida por Carlos Barro, se presentará el sábado en un festival de teatro de Valdivia, Chile, y en agosto estará en Colombia, con la obra «Perpetuo amor» de Rafael Otegui.
Dicen que una lluvia de teatro caerá sobre Valdivia. Cuentan que, entre las gotas de ese chaparrón teatral, el grupo neuquino Escénica TeaDanz Experimental mojará con su arte dramático patagónico.
En una itinerancia que comenzará este fin de semana en Chile y seguirá en agosto en Colombia, la obra «Perpetuo amor», estrenada en la ciudad en 2007 y dirigida por Carlos Barro, sale a recorrer Latinoamérica.
El elenco compuesto por Pablo Di Lorenzo, Mariel Suárez, Ana Alonso, Analía Virginia Calvo, Alejandra Kasjan y Verónica Moyano se presentará el sábado a las 20.30, en el Teatro Municipal Lord Cochrane, en el marco del XV Festival Internacional Lluvia de Teatro, organizado por la Corporación Cultural Municipal de Valdivia, junto a otras agrupaciones teatrales nacionales y extranjeras.
Según relató Barro, “todas las obras que el grupo va trabajando generalmente se envían por carpeta a los festivales que llaman a concurso. A través de los videos se hace la selección de las que van a integrar el festival, y tanto en Valdivia como en Colombia los organizadores han elegido ‘Perpetuo amor’”.
El de Valdivia es un festival internacional que empezó ayer y se va a extender hasta el domingo, por lo que el elenco está muy entusiasmado con lo que viene.
“A nuestra presentación le han dado un horario bastante central. Es un teatro muy grande y muy lindo, así que, aunque faltan tres días, ya empezamos a ponernos nerviosos”, relató el director de la puesta.
Una vez que lleguen de Chile, comenzarán a alistar las cosas para viajar a Colombia, en los primeros días de Agosto. Allí participarán durante tres días de un Encuentro de Teatro Popular Latinoamericano: “Este festival se llama Entepola. En realidad se hace todos los años, pero va teniendo diferentes sedes, y ya tiene más de siete años. Es un festival que se centra en lo que se llama teatro popular, y nuestra obra se adapta bastante a ese tipo de teatro. Allí las presentaciones serán más y en diferentes lugares”, sostuvo Barro.
Sencilla historia de amor
De todos los trabajos que la compañía envía a los concursos, la elegida en los dos países fue «Perpetuo amor». Esta obra está escrita por el neuquino Jorge Rafael Otegui y fue estrenada por primera vez en el año 2007, en el teatro Ámbito Histrión.
En ella se cuenta una historia de amor y hay una referencia constante a la Patagonia y su geografía, lo que convierte a la pieza en un espectáculo de singulares características. Es una puesta que es valorada por los curadores de los festivales, pero sobre todo, por sus propios hacedores.
“’Perpetuo Amor’ fue el primer trabajo que hicimos con Escénica. Con el texto de Rafael Otegui aplicamos esta idea, de fusionar el teatro con la danza, o el movimiento. En el 2006 dimos este primer paso, con la supervisión de Víctor Mayol (ver recuadro). Dentro de un taller de dirección comenzamos a trabajar, y a partir de ahí no paramos nunca más”, sostuvo Barro, quien además contó que con la obra ya han recorrido dos festivales, diferentes provincias, hace poco la llevaron al norte neuquino y desde que nació cambió mucho.
“Es adaptable, es para todo público y llega al corazón. Es una historia muy sencilla, tiene mucho que ver con lo que nos pasa a nosotros, con el sufrimiento, con un amor que no se concreta, pero que atraviesa miles de circunstancias particulares. Trata de un hombre que llega de Buenos Aires al Sur, y creo que la eligen porque moviliza”, dijo Barro.
Despliegue estético
Seis años hace que dentro de Ámbito Histrión esta nueva generación de teatreros, comandada por Carlos, busca concretar piezas teatrales escritas y dirigidas en Neuquén con vocación de recorrer el mundo.
Los espectáculos que ellos proponen están narrados a partir de la fusión del teatro y la danza y logran un despliegue estético cargado de imágenes, desde lo teatral y lo coreográfico.
Como relató el director: “Casi toda la estética, o el trabajo que hacemos, tiene que ver con una búsqueda, con una investigación para avanzar y llegar a diferentes lugares. Por suerte se nos está dando, y estamos recorriendo escenarios con lo que hacemos», dijo, y agregó: «En Escénica lo que busco es una mística de trabajo. No se si te van a reconocer por actor o director, pero sí que cuando digas ‘trabajé en Escénica’ la gente entienda de qué se está hablando”.
Además del teatro y la danza, los ingredientes de este elenco son, sobre todo, trabajo y entrenamiento actoral: “Estamos trabajando desde hace seis años, siempre fuimos un elenco grande. TeaDanz empezó como una idea y se fue enriqueciendo. Se trata de un teatro en movimiento, una compañía que fusiona el teatro con la danza y cuenta con 14 integrantes”.
Muchas horas de ensayo
En la actualidad, además de los preparativos para la gira, el grupo se encuentra trabajando en tres obras diferentes de manera simultánea: una futurista, una cómica y una poética.
“’La danza de Tersícore’, que es de un actor uruguayo. Después, con un grupo estamos haciendo una investigación sobre la vida cotidiana y las cosas que nos dan bronca en clave de humor. Y la última todavía no tiene título, pero ‘humanidad’, es el lugar hacia donde va. Es una obra enmarcada en el futuro, en la que un grupo de investigadores llega a ver cómo era el mundo años atrás”.
Barro está convencido de que, para que Escénica funcione y su estética tenga un sentido, debe haber un entrenamiento fuerte.
“Para mí es la forma que tenemos para entendernos y programar lo que se ve en escena. Yo vengo de un grupo que se llamaba Teatro del Histrión, que fue creado por Víctor Mayol y con él ensayábamos 20 horas semanales. Ahí entendí que el trabajo actoral tiene que ser a través de un entrenamiento. Somos un grupo profesional. Nuestro trabajo se basa en buscar, trabajar, investigar, inclusive con los propios cuerpos, y por eso lleva tantas horas de ensayo», contó, y agregó: «El entrenamiento lo hago yo, pero siempre hay colaboradores externos que trabajan con nosotros y aportan a lo que es la danza, el canto u otros lugares”.
FUENTE: diario La Mañana Neuquén
