Documenta (13) abre las puertas a la sorpresa. La legendaria feria, que se celebra cada cinco años, inaugurará este sábado su edición número 13 en la ciudad alemana de Kassel. Durante 100 días atraerá a unos 750.000 visitantes y volverá a encender el debate sobre el arte contemporáneo.
«La frontera entre lo que es y no es arte resulta irrelevante», explicó en la presentación la curadora de esta edición, la estadounidense Carolyn Christov-Bakargiev. Lo que exhiban los participantes «puede o no ser arte».
Su advertencia explica un curioso catálogo que incluye 297 nombres provenientes de 55 países, entre los cuales hay también científicos como Konrad Zuse, creador de la computadora, o difuntos como el español Salvador Dalí.
Pero quedarse en el nivel de la provocacion y la perplejidad puede resultar insuficiente para entender uno de los eventos culturales con más peso de Alemania y una cita artística de primer orden mundial.
«Hay muchas cosas que hacen a documenta diferente del resto de muestras colectivas o bienales», explica a la agencia dpa la española Chus Martínez, miembro del equipo más cercano a la comisaria Christov-Bakargiev.
«Una de ellas es la dimensión temporal. El hecho de que documenta se celebre cada cinco años la convierte en un laboratorio, en una universidad de reflexión sobre el papel político, social, estético y económico del arte».Por eso documenta, símbolo de modernidad, «no muestra sólo lo nuevo. Se acerca casi a la filosofía: intenta ver por qué el arte tiene sentido más allá del aquí y del ahora».
Las instalaciones, perfomances, piezas de videoarte, pintura y escultura que podrán verse en diversos sitios de Kassel hasta el 16 de septiembre tendrán así «una enorme influencia en lo que va a pasar los próximos años».
El mundo hispanohablante volverá a tener un peso considerable. Por parte de España sobresale el aporte del cineasta experimental Albert Serra, que rodará una película basada en textos de Adolf Hitler y de Goethe como caras opuestas del pueblo alemán.
También participarán el escritor Enrique Vila-Matas y la artista plástica Dora Garcia con proyectos hasta ahora secretos.
Desde Latinoamérica destaca la presencia de México, con seis artistas. También mostrarán sus obras el argentino Guillermo Faivovich, el venezolano Javier Téllez o la fallecida surrealista brasileña Maria Martins.
El «museo de los 100 días» fue creado en 1955 por el pintor y profesor de arte Arnold Bode, condenado por los nazis como representante del «arte degenerado».
El éxito hizo que la muestra comenzara a repetirse cada cuatro años. Desde 1972 adoptó una línea más política, una frecuencia de cinco años y la idea de un nuevo director en cada edición.
La documenta (13) presenta el catálogo más nutrido de su historia repartido por 31 «escenarios» en la ciudad, incluyendo lugares cotidianos como cines o estaciones de tren. Además habrá exposiciones paralelas en Kabul, El Cairo e incluso un parque nacional en Canadá.
Las fotos de la reportera Lee Miller en la bañera de la casa de Hitler en Múnich después de que las tropas estadounidense entraran en la ciudad en 1945, una montaña de basura y hierba elaborada por el artista chino Song Dong y un misterioso árbol de bronce con una gran roca entre las ramas que el italiano Giuseppe Penone colocó hace dos años en la ciudad son otras de las atracciones que ofrece la feria.
El proceso de destrucción y reconstrucción constituye uno de los ejes de pensamiento de esta edición. También «enfocarse por medio de las piezas de arte en el aquí y el ahora y en el hacia dónde vamos», se autodefine la muestra. «documenta es más que una exhibición: se ha convertido en un estado mental».
dpa
