Existe una leyenda según la cual Eva llevaba un trébol de cuatro hojas cuando salió del Paraíso. Durante mucho tiempo se pensó que cuando se encontraba un trébol de cuatro hojas en cierta forma se tenía también una pequeña parte del Paraíso, y por ello, de buena suerte.
Otra explicación estaría en una leyenda de Irlanda, según la cual el trébol era sagrado para los druidas, quienes, aunque no eran cristianos, pensaban que la cruz era un signo de buena suerte. Por ello cuando encontraban un trébol de cuatro hojas, además de considerarlo sagrado, era un símbolo de fortuna.