El Principito, una nueva película

Mañana llega a los cines de la región (Neuquén y Río Negro) «El Principito», un filme de animación que integra el clásico de Saint-Exupéry con la historia de una niña que conoce a un viejo aviador.

Es un clásico que ha atravesado décadas. Casi todos saben alguna frase de ese maravilloso libro; muchos lo han leído más de una vez. Y es cierto que ésta no será la primera vez que el niño rubio llegue a la pantalla grande, pero «El Principito» siempre merece una nueva oportunidad para que las nuevas generaciones sigan visitando su magia. Y así las cosas, mañana una nueva versión de filme –animado en este caso– desembarcará en la región.

En mayo, cuando fue exhibido en Cannes, emocionó al público. Los créditos lo acompañan: quien está al frente de este proyecto es Mark Osborne, el mismo realizador de la exitosa «Kung Fu Panda».

Lo cierto es que esta película no pretende ser una versión más de la archiconocida historia, sino retratar cómo el libro afecta a quienes lo leen.

En principio, la película cuenta la historia de una niña cuya obsesiva madre ya ha planificado cada minuto de su existencia, y ella marcha a paso firme, encaminada a obtener éxito en los estudios y después ser una profesional.

Pero algo se interpondrá en ese camino demasiado seguro. La pequeña conocerá de pronto a su nuevo vecino, un excéntrico aviador que la introducirá en el mágico mundo de «El Principito» y que la ayudará a mirar a las estrellas de una forma distinta.

La película está rodada con dos técnicas muy diferentes para los dos relatos paralelos: por un lado se utilizó la animación por computadora para narrar la «realidad» de la niña y el aviador, mientras que para los fragmentos que reconstruyen la historia original del libro de Saint-Exupéry se utilizó la técnica de «stop motion».

«El libro era especial en mi vida. Mi mujer me lo regaló hace 25 años cuando estábamos en la universidad. Ella solía citarlo a menudo y cuando leí un ejemplar por fin lo entendí todo. Soy muy consciente del poder del libro y de que se convierte en parte de tu vida», dijo Osborne, cuando presentó el filme.

Y puede ser. Para los que aún no se asomaron a la historia, hay que esperar a que se apaguen la luz de la sala, para descubrir eso de que lo esencial sigue siendo invisible a los ojos y que todas las personas mayores fueron al principio niños (aunque ya no lo recuerden).