Más acción y humor. Hoy se estrena, dos semanas antes que en los Estados Unidos, un nuevo capítulo de la saga, con Sid, Manny y Diego secuestrados por piratas…
Por Fiorella Sargenti
Madagascar, Toy Story, Shrek, Cómo entrenar a tu dragón, Happy Feet, Monsters Inc., Kung Fu Panda, Cars : todas tienen, tuvieron o tendrán como mínimo una nueva aventura en cines, de igual o incluso mayor presupuesto. Por estos días la industria casi no piensa en proyectos de animación que no puedan engendrar “spin-offs” (desprendimientos) o continuaciones de algún tipo, para incrementar lo más posible el rédito en las boleterías del mundo. Pero esto no siempre fue así.
A comienzos de la década pasada Hollywood descubrió qué redituable resultaba el negocio de las secuelas de películas animadas. Hasta aquel momento -salvo rarísimas excepciones-, parecía una locura invertir en la segunda parte de una historia de dibujitos. A menos que fuera un lanzamiento directo a video, ya que en ese caso no requería mucho esfuerzo económico ni artístico, por lo que los ‘90 estuvieron plagados con descendientes cinematográficos de Aladdin , el ratoncito Fievel, La Cenicienta, El Rey León, Pie pequeño (el dinosaurio “cuello largo”) y hasta Pocahontas .
El cambio comenzó en 1999 cuando casi por azar Pixar terminó estrenando Toy Story 2 en cines, en lugar de sacarla en formato doméstico como estaba planeado. El éxito de la película, que superó en recaudación a la original, le generó confianza a las demás compañías para que hicieran lo mismo. La gente, había quedado demostrado, volvía a pagar una entrada para ver a personajes ya conocidos si lo que se le ofrecía era de igual o superior calidad.
En 2002 llegó La Era de hielo , producida por Blue Sky Studios, una empresa que hasta el momento se dedicaba a realizar efectos especiales para películas de 20th Century Fox como Titanic , o Armageddon y Alien: Resurrección . Tenía todo lo que los chicos de la era post- Toy Story buscan en un filme animado: buena animación por computadora (CGI), personajes queribles pero no empalagosos y humor que no deja afuera ni al más grande, ni al más chico. Las aventuras del mamut Manny, el perezoso Sid y Diego, el tigre dientes de sable, no sólo resultaron efectivas con el público norteamericano, sino también en el mercado internacional, alcanzando status de fenómeno con La Era de hielo 3 , que recaudó más de US$ 600 millones fuera de los Estados Unidos.
En la tierra de Hollywood la saga de Ice Age (ése es su título original) no logró equiparar la popularidad de las producciones de Pixar o las Shrek de DreamWorks, pero su desempeño global se impuso sobre las competidoras e hizo que luego de ser estrenada en 2009, la tercera entrega resultara la película animada más taquillera de la historia. En su momento, ni siquiera el director Carlos Saldanha encontraba explicaciones para que un producto foráneo tuviera tanto éxito en regiones tan disímiles como China, Rusia y América latina. “Es un fenómeno que no puedo descrifrar”, dijo. Tal es el éxito en algunos países, que llegó a sobrepasar a Titanic , un imbatible histórico en recaudación.
Equipo que gana no se toca. Por eso, para La Era de hielo 4 Blue Sky decidió mantener la fórmula, apostar al 3D una vez más -garantizándose entradas a precio mayor- y conservar el foco puesto en el espíritu familiar de este grupo de disímiles animalitos prehistóricos. A pesar de que por ahora no hay una quinta parte confirmada, si los números se imponen, el anuncio no va a tardar. Mientras tanto, Manny y su manada siguen acompañando a su público en cortos -por el momento son cinco, tres de ellos ya se consiguen en las ediciones de DVD y Blu-ray-, especiales de TV -el último fue uno navideño de 26 minutos-, videojuegos -ya hay media docena distintos, para dispositivos Apple, Android, PlayStation, Xbox, PC y Wii- y hasta shows en vivo – Ice Age Live! A Mammoth Adventure será dirigido por un ex Cirque du Soleil y comenzará una gira mundial en octubre-.
Lejos de extinguirse, la “secuelitis animada” sigue marcando la agenda de las grandes productoras, que esperan seguir el camino de La Era de hielo y sus millones internacionales. En la gatera quedan Mi villano favorito 2 (2013), Monsters University (2013), Cómo entrenar a tu dragón 2 (2014), Kung Fu Panda 3 (sin fecha aún), un filme dedicado a los pingüinos de Madagascar , Tintín: Prisioneros del sol (con Steven Spielberg como productor y Peter Jackson como director), El Gato con botas 2 y, según Tom Hanks, Toy Story 4 . Y así, hasta que los chicos se cansen.
Fuente: diario Clarín