Según datos del Instituto de Juegos de Azar de Neuquén (IJAN) en la provincia hay registrados 450 personas adictas al juego. Además un 3% de la población padece el juego como un problema sin llegar a la adicción. Hoy comenzará una capacitación inédita en el país destinada a formar agentes de la salud para que puedan asistir de manera gratuita y rápida a ludópatas.
«Es una iniciativa pionera en Argentina porque aunque hay listado de autoexcluidos y numerosos tratamientos, no hay hasta el momento agentes que asistan gratuitamente a los afectados. Esto es un avance muy importante», explicó Alfredo Chía, psiquiatra a cargo del curso, sobre la capacitación que comenzará hoy en el Centro Administrativo Ministerial de 9 a 11. Está destinada a médicos, psicólogos, trabajadores sociales, enfermeros, psicopedagogos, agentes de sanitarios, terapistas ocupacionales, acompañantes terapéuticos y operadores comunitarios.
La responsable del departamento de Juego Responsable del IJAN, Wanda Lertner, reveló que en base al listado de autoexcluidos y de encuestas que han realizado desde el Instituto, hay en toda la provincia 450 ludópatas. Esto equivale al 1,8% de la población, mientras que un 3% practica juegos de azar, siendo un problema en sus vidas, pero no llega a la adicción.
Por su parte, Chía junto a su colega Julio Brizuela (quienes vinieron desde Buenos Aires para llevar adelante la capacitación), coincidieron que a nivel mundial las estadísticas indican que un 4% tiene una afectación leve al juego, mientras que un promedio del 1% es grave.
En cuanto al perfil destacaron que la ludopatía no reconoce clases sociales. «La gente con alto poder adquisitivo tiene más resto para que la familia no se entere. En cambio una persona que apuesta el dinero del alquiler o el alimento de sus hijos, enseguida empieza a hacer ruido en su entorno», remarcó Chía.
En base a informes nacionales y mundiales, los varones comienzan a apostar a los 14 años (no necesariamente en entidades de juego, sino con apuestas de dinero), mientras que las mujeres a los 18. «La evolución de la enfermedad en las mujeres es más rápida que en el hombre, es decir que son más adictas», agregó el psiquiatra.
Los especialistas remarcaron que se trata de una adicción de la conducta, y que una de cada cinco personas que desea y decide dejar de ser ludópata, se recupera. «Esto no es solamente un problema psicológico, sino social. Por cada persona adicta hay alrededor de 15 que están a su alrededor que terminan afectados», agregó Brizuela.
FUENTE: diario Río Negro
