50 casos por año. La cifra corresponde al promedio de intervenciones del programa provincial de Mediación Penal Juvenil. Abarca los casos en los que se apeló a este ámbito para afrontar conflictos de estudiantes adolescentes.
El 30 por ciento de las intervenciones por lesiones o amenazas están originadas en los colegios secundarios.
La iniciativa fue puesta en marcha por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) y el Ejecutivo provincial para intervenir en estos casos.
El programa provincial de Mediación Penal Juvenil recibe en promedio una denuncia de violencia escolar por semana, en un contexto donde los conflictos en los colegios secundarios representan un 30 por ciento de las denuncias por amenazas o lesiones derivadas desde la Fiscalía.
Este ámbito se creó hace una década, a instancias de un convenio entre el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) y el Ejecutivo, convirtiéndose en una iniciativa pionera a nivel nacional. El objetivo que tiene es aplicar la mediación en denuncias penales donde estén involucrados adolescentes de 12 a 18 años.
Cuando comenzó a funcionar hace una década, intervenía en alrededor de 100 causas anuales. Pero el año pasado superaron las 400 y proyectan una cifra similar para este.
El fuerte crecimiento no puede interpretarse como un alza en los conflictos entre adolescentes, sino que responde a «una mayor cantidad de derivaciones de casos para mediación, que se puede adjudicar a una confianza en este método de resolución de conflictos”, explicó Cecilia Basterrechea, responsable del programa.
También destacó que, de los pedidos de intervención vinculados con lesiones o amenazas, el 30 por ciento tiene vinculación con la vida escolar del Nivel Medio de la provincia. Según los registros estadísticos del organismo, atienden por año entre 40 y 50 consultas por conflictos originados en los colegios, lo cual implica un promedio de un caso por semana.
La proporción tiene correlato con 2009: el organismo recibió 307 derivaciones de la Fiscalía. Alrededor de 120 correspondieron a denuncias por agresiones leves (lesiones y amenazas). De esas, 42 expedientes hicieron referencia a casos de violencia escolar.
Sin embargo, Basterrechea recalcó que “es difícil dar cifras concretas en estas situaciones porque la demanda es muy variable; yo no generalizaría, pero sí puedo decir que el conocimiento del programa por parte de los directores de las escuelas hizo que los pedidos de intervención vayan en aumento, aún por fuera de lo que nos deriva el fiscal”.
La demanda que llega desde los colegios al programa se suma a los pedidos similares que se presentan cada mes en la Defensoría del Pueblo de Neuquén. En ambos casos, la intervención se realiza en acuerdo con los directores, por la ausencia de una ley que contemple la resolución de conflictos mediante el diálogo dentro de las escuelas.
Días atrás, por pedido del equipo que encabeza Basterrechea, el bloque del MID en la Legislatura presentó una propuesta para crear una norma provincial de mediación escolar.
El proyecto está aún en debate, pero ya se logró un acuerdo de los bloques que integran el Foro Educativo para incluir un artículo en la futura ley escolar provincial dedicado a la resolución mediada de conflictos, como una alternativa al tradicional régimen de sanciones.
Fuente: diario La Mañana de Neuquén
